4.4.13

Me enseñaste a levantarme después de cada caída, me enseñaste a sonreírle a la vida y a buscarle un lado bueno a todo. Pero ahora, tú no estás y no encuentro motivos por los que alegrarme de ello pero, a pesar de no encontrarlos prometo no venirme a bajo ¿Sabes por qué? Porque cuando piense en ti, voy a sonreír como cuando estaba contigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario